El duelo es la reacción normal ante cualquier pérdida: de un ser querido, un empleo, una relación, etc. Conviene entender que el duelo no es una enfermedad, la enfermedad realmente sería no hacer el duelo. Otro aspecto diferente consiste en si estamos preparados para afrontar esa pérdida, lo que para nosotros supone y si contamos con los recursos psicológicos necesarios para enfrentar estas situaciones.